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Del Este al Noroeste


Esta historia comienza con una familia judía lituana, formada por el matrimonio entre Harry y Fanny Grodzinsky, que emigraron al Londres victoriano de 1888 y se asentaron en el East End, donde se concentraba, por aquel entonces, la mayoría de la población judía llegada desde varios países europeos. Comenzaron a ganarse la vida vendiendo pan y dulces según los dictados kosher, como ya lo hacían en su Vilnius natal, en un puesto ambulante del mercado de Petticoat Lane. Muy pronto el negocio prosperó y les permitió abrir una panadería en la calle Fieldgate, y con los años un segundo local en Stamford Hill, donde instalaron el obrador principal gestionado por el hijo de la emprendedora pareja (en la imagen junto a su esposa). Su primer establecimiento, donde se encontraba su hogar, quedó por completo destruido durante un bombardeo alemán en la II Guerra Mundial, pero consiguieron sobreponerse al infortunio y en los años 60-70, F. Grodzinsky&Son era considerada la mayor panadería kosher de Europa, hasta la actualidad, donde la 5ª generación de la familia, que con el devenir del tiempo perdió la "y" de su apellido, regenta varios locales en Londres e incluso han llegado a abrir un sucursal al otro lado del charco, en Toronto.



Ya os comenté que merece la pena perderse por la zona noroeste de Londres, pues nos podemos encontrar con algunas joyas como esta deliciosa panadería-confitería kosher, claro que yo juego con ventaja al tener allí un fantástica hada madrina. Estuve en su horno principal de Stamford Hill y me zampé un rico bagel con semillas de amapola recién horneado, relleno de verduras y un tipo de salami vegetal muy consumido por la comunidad judía. También compramos algunos dulces y panes para llevarlos a casa, todo estaba delicioso. Me encantó pasear por la zona, muy tranquila y residencial, con canales navegables, donde la comunidad judía ortodoxa se refugia y donde nada extraordinario parece ocurrir, pero solo por visitar el obrador de los Grodzinsky merece la pena acercarse. 



GRODZINSKI J &  DAUGHTERS
170 Clapton Common
Stamford Hill
London E5 9AG 



La apacible mañana de paseo me traería alguna sorpresa más. Si los Grodzinsky se refugiaron en Londres en busca de una mejor vida para los suyos a finales del siglo XIX, la historia se volvía a repetir y a finales del XX, un gran flujo de personas de la Europa del Este llegaron a Gran Bretaña en busca de trabajo en la "grey economy", que no es otra cosa, hablando en nuestro idioma, que la economía del ladrillo. De nuevo lituanos, checos y un largo etcétera, dejaron sus países de origen en busca de trabajo en la construcción y ese es el motivo por el que en la zona noroeste de la ciudad también se asiente una importante comunidad de polacos y que muchos hayan abierto sus propios locales de ocio y restauración para, mayormente, uso y disfrute de sus paisanos. Desde el horno judío hasta el sencillo restaurante polaco Grota Smaku en el que almorcé, no hay más de 10 minutos a pie (ver mapa), allí pude degustar dos de los platos más típicos de la cocina polaca,  mis primeros pierogi (una especie de empanadillas rellenas de champiñones, requesón y patata) y un guiso de golumpki (hojas de col blanca cocinadas con carne y salsa de tomate), además de unas tortitas hechas de patata rallada (placki kartoflane). Confieso que no pude resistirme a pedirme una cerveza polaca. Ya sabéis, "adonde  fueres haz lo que vieres".

GROTA SMAKU 
98 High Road
London N15 6JR

Espero que os haya gustado el paseo y que si os acercáis por la ciudad, sobre todo aquellos que ya la conozcan mejor y tengan tiempo para hacer nuevas y diferente incursiones, pues aquí tenéis otras opciones muy apetitosas.

Columbia Road



Londres está lleno de sitios pintorescos y Columbia Road es uno de ellos. Situada al noreste de la ciudad, esta calle surgió como camino del ganado a los mataderos de Smithfield y más tarde, con el crecimiento que tuvo lugar con la revolución industrial en la época victoriana, se urbanizó para dar respuesta a la explosión demográfica de la gran urbe. Resumiendo mucho la sorprendente historia de la zona, a finales del siglo XIX el carácter comercial de la calle se fue perfilando, aquí se instaló un floreciente comercio de madera y de su mano surgieron artesanos y oficios relacionados con el sector (tapicerías, fresadores, etc.). Posteriormente se instaló los domingos un mercado de flores y plantas traídas desde las huertas cercanas de Hackney e Islington. En los años 70 la calle y el mercado entraron en declive y se planteó su cierre, pero los vecinos lucharon por conservarlo y en los 80 resurgió cual Ave Fénix, instalándose en toda ella un puñado de tiendas, cafés y pubs con fachadas de madera de colores realmente adorables en su conjunto.





Me encanta pasear por esta zona, sin duda es una de mis favoritas, tranquila, tan “lovely”, con sus preciosos y originales comercios, para mi es una de las calles con más auténtico sabor inglés de la ciudad, sin franquicias, sin grandes almacenes.

Una curiosidad y dato importante: la mayoría de las tiendas de Columbia Rd. sólo abren el día de mercado (si vais entre semana os encontraréis con la mayoría del comercio cerrado), aunque en Navidad, los cuatro miércoles previos al 25 de diciembre, se hace un mercado navideño de tarde donde todas las tiendas sacan sus mercancías a la calle y la noche se vuelve de lo más animada y concurrida. Esta vez pude disfrutar allí de un frío y helado miércoles pre-navideño y realmente me encantó, a pesar de las bajas temperaturas y del abundante vino caliente que esto me obligó a tomar... El alcohol se evaporaba al calentarse, ¿verdad?




¿Qué podemos encontrarnos en Columbia Rd? Pues desde adorables cafés y pubs, tiendas de comida delicatessen con café incluido como Jones' Dairydonde tomé hace años unas auténticas ostras colchester (foto de cabecera); de cerámica antigua; accesorios artesanales y vintage de tela como los de Beyond Fabrics; de muebles de madera y decoración; hasta un ancianita perfumista con nombre de cuento, Angela Flanders, que al preguntarle por qué había llamado a uno de sus perfumes “Josephine” (el nombre que hay detrás de Delikat), me comentó que la razón es que llevaba como aroma principal  la flor de violeta, la preferida de la emperatriz francesa, y que al morir ella, Napoleón mandó guardar violetas de sus jardines en un colgante que siempre llevaba al cuello. Leyenda o realidad, en todo caso es una bonita historia que quedo grabada en mi novelesco cerebro.


 O una antigua tienda de golosinas, Suck& Chew, llena de botes vintage con esas "chuches" que ya no vemos en ningún sitio.






Si seguimos caminando nos encontraremos con un curioso salón de belleza retro, The Powder Room, para auténticas chicas pin-up. 








¿Me enseñarán aquí a ponerme de una vez el eye-liner en condiciones? La próxima ocasión entraré para averiguarlo.







Una sorprendente tienda de accesorios, con sombreros de todo tipo de diseños y original escaparate.




¿Queréis más motivos para incluirla en vuestra agenda de viaje? Pues nada mejor que hacer una parada para tomar un delicioso almuerzo. He comprobado en mi reciente visita a la ciudad, que la cocina inglesa está teniendo una revisión magnífica por parte de jóvenes chefs, si bien siempre que voy a Londres aprovecho para conocer gastronomías de otros países, dada la gran cantidad de personas de otros confines asentadas en la ciudad desde hace décadas, en este viaje ha sido distinto y he conocido estupendos restaurantes donde tomar un buen "pie" (pastel de carne) o un sabroso "cumble" de postre, pasados por el tamiz de la cocina contemporánea.


Uno de ellos se encuentra en esta preciosa calle, Brawn. Es un agradable restaurante de mesas de madera, luminoso, con comida sencilla de productos locales, donde disfruté de un riquísimo pie de carne de pato y de una muy buena carta de vinos. Muy recomendable.

Brawn (49 Columbia Rd. - London)






¿He dicho ya lo que me encanta Columbia Rd? Os invito a que entréis en la Web que tiene la calle, podéis hacer un paseo por la acera izquierda y derecha, comercio a comercio e ir haciendo boca, yo espero pasearme pronto por allí con un clima más primaveral.

http://columbiaroad.info/


Diario de una adicta al té IV (Afternoon tea)




Aunque no lo creáis, después de tantas visitas a Gran Bretaña, aún no había disfrutado de un Afternoon Tea como la tradición manda. Esta comida-merienda, que se sirve entre las dos del mediodía y las cinco de la tarde más o menos, comenzó a ser practicada por las clases altas en el siglo XIX, y consiste en acompañar el té con una selección de bocados dulces (Victoria sponge cake, tartaletas de frutas, scones...) y salados (sándwiches de pepino, huevo, jamón...), con la rica clotted cream y mermeladas de frutos rojos de acompañamiento. Se ha convertido pues en una atracción turística más del país, ya que obviamente pocos británicos tienen en su día a día, tiempo para tomarse tamaño descanso y festín.

Este año y disfrutando de una larga estancia en Londres, ya no había más excusas para ser una "guiri de pro", y es que la ocasión lo merecía sobradamente, celebrar uno de los regalos más grandes que me ha dado la vida, la amistad de 25 años de mi amiga con mayúsculas, mi casi hermana, la que siempre está ahí para hacer mis alegrías más grandes y las penas más livianas, a pesar de que nos separen tantos kilómetros de distancia. Dicen que la verdadera amistad no es inseparable, es aquella capaz de separarse y no cambiar, yo lo experimento día a día y me siento muy afortunada por ello.




Esta aventura gastronómica nos exigía un rastreo a conciencia para elegir adecuadamente el sitio. Los lugares más conocidos, y por tanto turísticos, de Londres para disfrutarlo, son los muchos hoteles de lujo que la ciudad tiene. Cada año además se otorga un premio al mejor y en este link podréis ver cuáles han sido los premiados en el 2011. Año tras año muchos nombres se repiten: el Ritz, el Brown's Hotel, el St. James... Los precios son prohibitivos, una media de 50-60 libras por persona, dependiendo de los extras (champagne), y sí, nos aseguramos lujo en la vajilla, lujo en las estancias y mucho turista ricachón a nuestro alrededor, pero no por ello máxima calidad en el producto que se ofrece, pagamos mucho  nombre indudablemente.



Como la ciudad está plagada de lugares alternativos, recoletos y muy agradables para pasar una amena tarde, nos decidimos por The Tea Rooms, al noreste de la ciudad, una bonita cafetería, especializada en clásicos pasteles británicos, y donde disfrutamos de una rica merienda acompañada de una previa copa de champagne, scones, brownies, el famoso Victoria Sponge (realmente delicioso), pasteles de zanahorias y de limón, y por supuesto, que no se nos olvide, de una riquísima taza de té. No pudimos dar cuenta de todo lo que nos sirvieron (en la imagen de cabecera), confieso que  no hacía más de dos horas que habíamos terminado de almorzar, así que nos llevamos a casa las sobras para disfrutarlas al día siguiente como desayuno. Todo nos salió por unas 45 libras para dos personas, menos de lo que cuesta una sola consumición en el Ritz.




Un sitio recomendable, agradable y con muy buena calidad en sus productos, que suelen ser de granjeros locales, de temporada, y conforme al comercio justo. Además organizan talleres de cocina, clubes de lectura y fiestas varias.

The Tea Rooms
http://www.thetearooms.org/
Stoke Newington - Barn Street
London

¿Dónde están mis juguetes?

Austin a pedales
1959

Ya pasadas las fiestas navideñas y aún con la resaca del día de Reyes, me estreno en el 2012 con una entrada sobre un lugar muy especial, pero antes permítanme lanzar algunas reflexiones jugueteras que explican el título de esta entrada. No han notado, queridos lectores, que han desaparecido de la faz televisiva aquellos eternos minutos de anuncios de juguetes que en los 80-90 nos invadían. He escudriñado las distintas cadenas televisivas en varias franjas horarias y nada en el horizonte TDT. ¿Qué fue de los anuncios de Playmobil, del Tente, de las muñecas de Famosa, de las tragabolas o mecanos, puzzles y demás? Nadie parece saber nada, pero lo curioso es que se siguen vendiendo estos juguetes en las tiendas, aunque la pequeña pantalla solo tiene lugar para juguetes electrónicos y cibernéticos, sin diferencia de edad en el público destinatario. 




Detalles de una pastelería y una  carnicería 
Casas de muñecas de principio siglo XX



La verdad es que siento nostalgia de aquellos maratones publicitarios jugueteros y recuerdo con cariño, que mi hermano y yo nos entregábamos a un juego delante de la pantalla, que consistía en que a cada uno le tocaba un anuncio de juguetes sucesivamente y, bendita inocencia infantil, eso quería decir, imaginariamente, que eran los regalos que nos llegarían. Lo que ocurre ahora, no es sino un reflejo de la sociedad en la que vivimos, regida por el marketing y las grandes ventas, ya no importan la capacidad de ilusión y la imaginación de millones de niños.


Muñeca 
1745-50

El caso es que tras esta "profunda" reflexión, hoy vengo a enseñaros un museo muy especial y poco conocido que visité en Londres hace unas semanas, el V&A Museum Childhood (Museo de la Infancia perteneciente al Victoria&Albert). Situado al noreste de la ciudad (Bethnal Green), lo peculiar de este lugar es que reúne una colección fascinante de todo lo que rodea al mundo de los niños: juguetes, juegos, cuidados, mobiliario, ropas, etcétera, desde el siglo XVII hasta la actualidad, además de tener una de las mejores colecciones del mundo de casas de muñecas (esto es realmente increíble, ver como eran las casitas de madera con la que jugaban los ricos niños de la nobleza y alta burguesía de hace siglos, llenas de miles de detalles y en tamaños XXL). 


Interior del Childhood Museum

El museo está en un gran edificio de ladrillo rojo dividido en varias galerías: una para juguetes en movimiento, otra dedicada a la creatividad, una tercera a la niñez y por último una gran sala de estar. Realmente, es un lugar especial, con una agradable coffee shop en la que hacer un alto en el camino; y una bonita tienda con cuentos, libretas y objetos varios de papelería (mi debilidad). Un rincón en el que podemos hacer un viaje a nuestra infancia y a la de aquellos locos bajitos que hace muchísimos años habitaron el planeta.

Cochecito de bebé
Época Victoriana

Hasta principios de marzo además podréis disfrutar de una exposición temporal llamada "Magic World", donde se explora el mundo de los cuentos de hadas y la literatura fantástica, la historia y los orígenes de la magia y su influencia en artistas y escritores. 



Hice cientos de fotos pues todo era una curiosidad, pero aquí solo puedo dejaros alguna de ellas para que podáis adivinar el contenido de la colección y así, en vuestra próxima visita a la ciudad, no dejéis de ir a este museo lleno de sueños e ilusiones.

Web del museo: http://www.vam.ac.uk/moc/



The Beach Boys - The man with all the toys

Paseando por Londres encontrarás a un extraño alto y moreno...



No, no me ha dado por cambiar el título de la última película estrenada de Allen ( y matizo con lo de estrenada, porque el prolífico director ya tiene grabado otro film en París), aunque seguro que me he acercado bastante más al verdadero título "You will meet a tall dark stranger", que en España, una vez más, ha sido traducida por el insípido "Encontrarás al hombre de tus sueños". ¿Quién se encargará en esta madre patria, de las traducciones de los títulos cinematográficos? Puedo aceptar que hagan esto con una de esas soporíferas películas de serie B de la sobremesa de sábados y domingos, en las que acabas dormida y de pronto al despertar, la única pregunta que viene a la cabeza es "¿la habrán matado ya?". Comienzan con un primer plano de una familia feliz y bien avenida, preparándose el almuerzo o la cena, pero una inquietante música te hace presagiar que al final, probablemente alguno de ellos acabará con todos sus consanguíneos. Entonces un gran título en inglés aparece en la pantalla "A father for Sally", y de pronto la voz en off dice, en un castellano alto y claro, "Extraños en la noche"... y te quedas estupefacta. Pero eso no se hace con una película de Allen, hombre por dios.

Retomando el tema del porqué del título de este post, inaugural de la nueva temporada, comentaros que va dedicado a uno/a de los protagonistas de la película que no aparece en los títulos de crédito, femenino o masculino, según se mire, hablo de la ciudad de Londres. El film está lleno de localizaciones de esta gran urbe, muchas las reconocía al vuelo, otras he tenido que investigar por no estar del todo segura, aunque no iba mal encaminada. Por ello, os invito a realizar este recorrido por la ciudad del Támesis de la mano de Woody Allen, no sin antes comentaros ligeramente mi opinión sobre el film. Es sin duda una comedia entretenida, no es de lo mejor de Allen (sigo sintiendo una especial predilección por "Balas sobre Broadway"), pero está llena de divertidos gags y diálogos ocurrentes y eso ya es de agradecer. Se ha criticado que los personajes son vacíos, caprichosos, pero indudablemente esto ha sido algo consciente y premeditado. Pienso que Allen ha querido reflejar todas las debilidades humanas con este trabajo: dinero, sexo, fama, juventud, éxito... y todas las argucias para conseguirlos por parte de un puñado de personajes de clase alta.

Let's go for a walk without spoilers.

PADDINGTON

Las imágenes tomadas en la calle, donde se desarrollaban muchas de las escenas, eran difíciles de identificar. En ellas aparecían las casas estilo georgiano, blancas y con columnas, que tanto abundan en la ciudad, sobre todo en las zonas con caché. Los personajes entraban y salían, desarrollándose las escenas en varias ocasiones en los soportales de estas típicas residencias.





Gracias a la página de la productora, he podido averiguar que se trata de grabaciones realizadas en su mayoría en la zona de Paddington, distrito de Westminster, concretamente la casa de los protagonistas principales está situada en Cleveland Square (Bayswater). Por cierto, es el único dato de localizaciones que dan los productores en la página web. Es una zona residencial, a mitad de camino entre Marylebone y Notting Hill, efectivamente repleta del estilo de casas mencionado y donde muchas de ellas son hoteles. También muy cercana a Hyde Park y Kensington Gardens, dato importante para los amantes de la naturaleza.





Paddington es una de esos barrios del centro de Londres realmente caros para vivir, y por ser más que todo residencial, yo os recomendaría dar un paseo de unos 20 minutos hasta la vecina Marylebone, zona repleta de coquetas tiendas, pastelerías (no perderse la Chocolatería Rococo) y restaurantes. Un apunte para hacer un almuerzo, la quesería-tienda delicatessen "La Fromagerie", y luego tomar el té, puntuales a las cinco de la tarde, acompañado de scones calentitos, servidos con cubertería de plata, crema fresca y mermelada (quién los pillara ahora) en la Wallace Collection. Esta galería posee una pequeña colección pictórica reunida por un excéntrico dandy del XIX, el cuarto marqués de Hertford, apellido de la familia a la que perteneció esta mansión, donde podemos encontrar obras de Rembrandt, Rubens, Tiziano... Si os apetecen zonas verdes tenéis el Regent's Park muy cerca.

Como veis en este primer apunte y en los sucesivos, las zonas que se muestran son puramente británicas y acordes con el alto nivel de vida de los personajes.


LITTLE VENICE


Little Venice (Warwick Crescent)

Toda ciudad que se precie tiene una "pequeña Venecia" escondida, así de pronto me acuerdo de la "Petite Venise" de Colmar, muy cerquita de Estrasburgo, o la de Bamberg en Alemania, pero seguro que luego me vendrán otras a la memoria. Pues bien, Londres también posee una, faltaría más, la llamada obviamente "Little Venice". Situada junto a Warwick Crescent y muy cerca de donde viven los protagonistas, de ahí que lleguen dando un corto paseo. Es una zona donde confluyen el Grand Canal con el Regent's Canal, creando una zona muy pintoresca de barcos de colores (dentro de algunos de ellos existen restaurantes e incluso en algunos hay gente que vive, como en Amsterdam) y de agradables cafés y casitas de ensueño. Existe la posibilidad de tomar un barco y cruzar el Regent's Canal  hacia el noreste, hasta llegar a Camden Town, cosa que yo no he hecho nunca ni creo que lo haga, prefiero hacerlo a pie. Como podéis ver en este fotograma, los dos personajes flirtean en la Little Venice londinense.






BURLINGTON ARCADE

Londres es una ciudad de lujos, como casi todas las grandes urbes occidentales, y no faltan en ella calles cuajadas de exclusivos y carísimos establecimientos, inaccesibles para la mayoría de los mortales, donde un par de zapatos hechos a mano con la más fina de las pieles pueden costarte el sueldo de varios meses. Tal es el caso de la céntrica Burlington Arcade, una galería cubierta abierta desde inicios del siglo XIX en Mayfair, donde se encuentran un buen puñado de las tiendas que suministran directamente a su graciosa majestad y familia, de hecho, si así ocurre, muestran el escudo de la realeza en toda su exclusiva publicidad. A Burlington Arcade se puede entrar tanto desde Picadilly como desde Burlington Gardens, ya que la galería atraviesa toda la manzana. Lo que más abunda en ella sin lugar a dudas son las joyerías, los más afamados joyeros tienen aquí su "chiringuito". Si ver tiendas, por muy exclusivas que sean, os horroriza, muy cerca de allí está la Royal Academy of Arts, hace años pude ver aquí una increíble retrospectiva de Kandinsky.


Volviendo a las joyerías, me preguntaba yo insistentemente, cuál de ellas habría abierto sus puertas al equipo de rodaje de Allen, para que Naomi Watts (ella genial en su papel, como siempre) y Antonio Banderas (él...soso con ganas), representaran la típica escena de "hombre quiere regalar diamantes a una mujer y requiere el consejo de su secretaria/ayudante". Pues bien, me puse a investigar en la red e increíblemente di con un artículo, donde no aparecía por ningún lado el nombre de la película, pero sí describía que se grabó una escena de una película de Allen en la joyería Bentley & Skinner, una de las míticas de la ciudad, experta en el diseño de joyas antiguas  y que antes se encontraba en New Bond Street. Por supuesto, tiene entre sus clientes a la realeza británica desde tiempos de la reina Victoria.

Joyería Bentley & Skinner situada dentro de Burlington Arcade


BATTERSEA

Battersea es una zona al sur de Londres, en otro tiempo zona industrial de la ciudad, y que ahora, sobre todo en la parte que tiene como frontera norte al Támesis, se ha transformado por completo y poblado de edificios de apartamentos modernos y vanguardistas. Vivir aquí, hoy por hoy, cuesta un riñón. Estaba casi segura, por la panorámica que muestra el fotograma donde aparece Hopkins, que la imagen estaba captada desde el Albion Riverside Building (muy cerca está el estudio de Foster & Partners) y mi hermano que pasa a menudo por aquí, me lo ha corroborado. Al fondo, se ve el victoriano y precioso puente Albert Brigde, que lleva directamente a Chelsea y su famosa calle comercial King's Road en la otra orilla (este paseo andando es muy recomendable).


No quiero aburriros más, pues el post se está haciendo muy largo, Londres es así de intensa, pero a lo largo del largometraje, un buen puñado de esquinas, si bien no las identificaba exactamente con su nombre y apellidos, me devolvían la imagen de la ciudad que tanto me gusta, como esas pequeñas librerías de viejo que aparecen por cualquier pequeña calle y que tienen a su lado un pub o cafetería con mesas de madera fuera, donde sentarte a leer tranquilamente los días soleados (que no creáis que no existen, hablo de los sunny days).



O esos restaurantes/cafés tan originales, surgidos de imprevisto. Vas a una tienda de teteras, libros, ropa o de lo que sea, y casi siempre encuentras al fondo una coffee shop coquetona, para tomarte un té calentito. Pero no vivo en mi, desde que mis ojos presenciaron la escena de Anthony Hopkins y Gemma Jones en lo que parece una especie de invernadero-restaurante, donde me imagino se podría comprar plantas y, por supuesto, degustar exquisitos menús. Lástima que la fuerza mayor me impidió quedarme a ver todos los títulos de crédito completos, que puede que aparezca una mención, pero ya tengo a mis adorables contactos londinenses en alerta para encontrar el sitio e ir en próxima visita si realmente merece la pena.

Edito para decir que encontré este precioso lugar, se llama Pertesham Nurseries, aquí podéis ver su Web. Se trata de una floristería, tienda de muebles y decoración en general, cafetería y  restaurante... Un lugar sin duda muy británico, con elevados precios, no olvidemos que estamos en Londres :-), situado en el barrio de Richmond, al suroeste de la ciudad.

¿Dónde estará este lovely restaurante en lo que parece un invernadero? Lo encontré!

Tengo que confesar que me lo he pasado pipa escribiendo este post, oteando fotogramas de la película y tratando de identificar los lugares que mostraban según lo que recordaba al verla. Londres es una ciudad que realmente me fascina y a la que no me cansaré de volver una y otra vez. He perdido la cuenta de las veces que la he visitado y disfrutado, pero para qué contarlas, si cada una de ellas es única e irrepetible, como muchas de las películas de Woody Allen.

Hasta la próxima.


The Clash - London Calling

Las películas de W. Allen están plagadas de estupendos arreglos de música jazz y clásica, que dan un ritmo especial a sus comedias. Sin duda son parte importante del guión, pero me voy a salir por la tangente y en mi estilo, he elegido a otro"clásico" de la historia  de la música británica, tanto el grupo como la canción. The Clash no necesitan presentaciones, solo decir que con esta canción y el álbum del mismo nombre al que pertenecía, rompieron todos los moldes en los recién estrenados años 80. Es considerado uno de los mejores trabajos de la historia de la música. 

LA GASTRONOMÍA DE LA REGIÓN DE LOS CINCO RÍOS

Tengo pendientes algunas entradas en el blog de mis visitas a Londres, así que hoy me voy a animar y voy a contaros un secreto: en un lugar escondido del Whitechapel londinense, se encuentra uno de los mejores restaurantes de comida punjabí del Viejo Continente.


El local lleva el nombre de la familia Tayyabs, procedentes del Punjab pakistaní, y lleva operativo desde los 70, para alegría de los miles de emigrantes procedentes de la región que llegaban a la capital británica por aquellos años y que añoraban la gastronomía tradicional de su tierra. Poco a poco el East End londinense fue cambiando su fisonomía, mezclándose el acento “cockney” con remotas y exóticas lenguas, y difuminándose el recuerdo de Jack el Destripador y sus fechorías por el barrio, entre el aroma del curry y los rezos de la Mezquita.



Metiéndonos en faena, en Tayyabs podremos degustar pescados y carnes asadas en el típico horno Tandoor (de ahí el nombre del famoso plato de pollo Tandoori), curries y masalas auténticos, es decir “a pelo” (sin mezclar con azúcar ni otras melindres para adecuarlos al gusto occidental, por lo que hay que pedir abundante agua :-). También tienen exquisitas samosas (empanadillas), arroces y verduras (los vegetarianos tienen también su hueco) y un larguísimo etcétera, ya que la gastronomía punjabí es muy rica y variada. No sirven alcohol, pero no os alarméis, ya que permiten que los clientes puedan llevarlo. El precio medio de un almuerzo/cena es £ 20 por persona más o menos.

La decoración del establecimiento es sencilla, pero una de las cosas que más me sorprendió el día que lo visité, es que la mayoría de las mesas estaban llenas de familias numerosas de hindúes /pakistaníes que disfrutaban de lo lindo del almuerzo. Incluso las mujeres iban con sus saris tradicionales (no sé qué pensáis, pero para mi esto significa que el sitio es un valor seguro y que no ofrece comida mediatizada por los gustos occidentales). Os advierto que no existe la posibilidad de reservar mesa con antelación, así que quizás podamos encontrarnos en la entrada una cola de gente esperando mesa. Paciencia que merece la pena.


Y para finalizar, una curiosidad: el cocinero español Abraham García recomendó hace años este sitio en una entrevista en un diario nacional. Él fue la causa de que acabara almorzando allí, tal vez se lo tendría que agradecer algún día.

Tayyabs83-89 Fieldgate Street
E1 1JU London  http://www.tayyabs.co.uk/


A.R. Rahman- Ringa Ringa

A. R. Rahman es un compositor, productor y músico hindú. Su carrera está ligada al cine por ser artífice de multitud de canciones de películas de Bollywood, con su paso posterior a Hollywood, donde en 2008 alcanzaría el exito con la composición de varias canciones, entre ellas la de la entrada, para la oscarizada "Slumdog Millionaire", donde ganó el Oscar a la mejor canción y a la mejor banda sonora.

SAF RESTAURANT: ¿NO APTO PARA CARNÍVOROS?



Así es, "no apto para carnívoros", quizás debí decir "prohibido", pero no quiero que los amantes de la proteína cárnica, creyéndose incapaces de renunciar a unas costillas asadas rebosantes de salsa barbacoa o a unos chuletones bien vetaditos de grasa, se priven de tan suculentos y sanotes placeres. Quizás en un arrebato de orgullo de vuestra condición "depredadora", no queráis ni poner un pie en este local de la capital británica, pero aquí estoy yo para convenceros de lo contrario.

El restaurante Saf, situado en el barrio de Shoreditch, está siendo toda una revolución en la restauración londinense, no solo es una auténtico restaurante vegano sino que es el primer restaurante raw de la ciudad (ningún plato está sometido a temperaturas superiores a los 48º para conservar todos sus nutrientes y vitaminas). Todos los alimentos son orgánicos, frescos y libres de trigo y gluten (un paraíso para los celiacos). Después de esta breve descripción, puede que el asunto os siga pareciendo poco atractivo al paladar, pero como catadora no oficial del establecimiento, os puedo decir sin miedo, que abandonéis los posibles prejuicios y experimentéis nuevos y asombrosos sabores.

La carta del Saf es asombrosa y variada, rotando según las verduras y frutos de la temporada. Cuentan además con cerveza orgánica y vinos biodinámicos (respetando los ciclos lunares de la cosecha y sin usar maquinaria industrial) y unos postres de rechupete. El chef Sad Sarno es el encargado de echar los restos en la cocina, poniéndole una imaginación increíble, desde queso sin leche realizado con anacardos y pimiento y servido con tostaditas de semillas de lino prensadas, pasando por tallarines de calabacín con una textura idéntica a la pasta, dumplings rellenos de verduras y tofu (son algunos de los platos que pedimos y que podéis ver en la imagenes).



Si todo esto no os parece suficiente, y las fotografías que he puesto de algunos de sus platos no han bastado, os comento que en el plano estético el restaurante es de lo más agradable y luminoso, se respira relajación y tranquilidad. Dispone además de un patio con enredaderas donde, si el buen tiempo lo permite, podréis pasar una fantástica velada.



En mis fantasías sueño con raptar al cocinero y encerrarlo en casa, para comer a diario esta comida tan sana y a la vez tan divertida y sabrosa (os lo dice alguien que también puede disfrutar de un buen asado argentino alguna que otra vez... no vayáis a creer).

¿Os he convencido? Tienen hamburguesa... pero vegana vegana desde la capa superior hasta la inferior.




Of Montreal - Vegan in furs

Of Montreal es una divertida banda estadounidense originaria de Georgia, que formó parte de la generación de bandas del Elephant 6 Collective. Kevin Barnes, el vocalista, decidió nombrar «of Montreal» a esta tras un romance fallido con una chica originaria de Montreal. Su primer disco vio la luz en 1997 y fue muy bien acogido por la crítica independiente calificándolos d de prometedora banda de indie pop-rock. El tema de la entrada pertenece a su trabajo “Satanic Panic in the Attic”,  el cual los consolidó definitivamente. (2004).

THE WAPPING PROJECT



Acabo de llegar de pasar de nuevo unos días en Londres y traigo bajo el brazo, varios descubrimientos que merecen figurar en el blog. Esta ciudad es así, está en continua transformación y los proyectos más originales y curiosos aparecen en cada rincón como los champiñones.



The Wapping Project es un ejemplo de esta profusión de nuevas ideas. Un espacio multicultural donde galería de arte, restaurante, bar y sala de conciertos se unen. Pero lo singular del lugar, viene dado por estar situado en una fábrica hidráulica de la época victoriana (1890) que cerró a finales de los años 70. Os podéis por tanto imaginar las dimensiones del edificio y las posibilidades que da para realizar cualquier tipo de manifestación artística. La creadora australiana Jules Wright compró esta fábrica y la transformó, con la ayuda de su marido el arquitecto Joshua Wright, en el Proyecto Wapping (el nombre le viene dado por estar situado en el barrio del mismo nombre).




La sala del restaurante-bar es enorme, con techos altísimos de ladrillo rojo donde compartiréis mesa con los motores , tubos de presión, cadenas oxidadas, enormes ganchos, válvulas y turbinas que en otro tiempo generaron energía. En la carta, nos encontraremos con una cuidada selección de vinos australianos a cargo de la Sra. Wright. Al fondo de este área, bajando unas escaleras de hierro, es donde se encuentra una de las zonas más amplias para realizar las exposiciones temporales. Este fin de semana en concreto, me encontré con una exposición del fotógrafo Guy Bourdin.



En el exterior, un hermoso jardín donde también se exponen obras y performances y un pequeño invernadero que hace las veces de librería.



Pero aún hay más, si subís a la parte alta del edificio encontraréis un sorprendente estanque que sirve también de espacio para mostrar arte. Yo me encontré con la curiosa performance de la artista Diane Howse "The lily pond", con nenúfares artificiales y una gran poesía de Alfred Lord Tennyson (por tamaño y por contenido).




Nothing Will Die

When will
the stream
be aweary of flowing
Under my eye?
When will the wind be
aweary of
blowing
Over the sky?
When will the clouds be aweary of
fleeting?
When will the heart be aweary of beating?
And nature die?
Never, oh!
never, nothing will die;

The stream flows,
The
wind blows,
The
cloud fleets,
The heart beats,
Nothing will die.

Nothing will
die;
All things will change
Thro' eternity.'
Tis the world's winter;
Autumn and summer
Are gone long ago;
Earth is dry to the centre,
But spring, a new comer,
A spring rich
and strange,
Shall make the
winds blow
Round and round,
Thro'
and thro'
Here and there,
Till
the air
And the ground
Shall
be fill'd with life anew.

The world
was never made;
It will
change, but it will not fade.
So let the wind
range;
For even and
morn
Ever will be
Thro' eternity.
Nothing
was born;
Nothing
will die;
All things will change.

Alfred Lord Tennyson


THE WAPPING PROJECT
Wapping hidraulic Power Station
Wapping Wall
http://www.thewappingproject.com/


Marta Wainwright - Factory

Martha Wainwright es una cantante de folk/rock canadiense. Nacida en el seno de una musical familia, es hija de Loudon Wainwright III y Kate McGarrigle,  además de hermana del músico Rufus Wainwright. Su primer álbum homónimo apareció en 2005 y es al que pertenece el tema de hoy. En 2006 colaboró en el álbum del grupo norte-irlandés Snow Patrol “Eyes Open”.
 
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