No, no me ha dado por cambiar el título de la última película estrenada de Allen ( y matizo con lo de estrenada, porque el prolífico director ya tiene grabado otro film en París), aunque seguro que me he acercado bastante más al verdadero título "You will meet a tall dark stranger", que en España, una vez más, ha sido traducida por el insípido "Encontrarás al hombre de tus sueños". ¿Quién se encargará en esta madre patria, de las traducciones de los títulos cinematográficos? Puedo aceptar que hagan esto con una de esas soporíferas películas de serie B de la sobremesa de sábados y domingos, en las que acabas dormida y de pronto al despertar, la única pregunta que viene a la cabeza es "¿la habrán matado ya?". Comienzan con un primer plano de una familia feliz y bien avenida, preparándose el almuerzo o la cena, pero una inquietante música te hace presagiar que al final, probablemente alguno de ellos acabará con todos sus consanguíneos. Entonces un gran título en inglés aparece en la pantalla "A father for Sally", y de pronto la voz en off dice, en un castellano alto y claro, "Extraños en la noche"... y te quedas estupefacta. Pero eso no se hace con una película de Allen, hombre por dios.
Retomando el tema del porqué del título de este post, inaugural de la nueva temporada, comentaros que va dedicado a uno/a de los protagonistas de la película que no aparece en los títulos de crédito, femenino o masculino, según se mire, hablo de la ciudad de Londres. El film está lleno de localizaciones de esta gran urbe, muchas las reconocía al vuelo, otras he tenido que investigar por no estar del todo segura, aunque no iba mal encaminada. Por ello, os invito a realizar este recorrido por la ciudad del Támesis de la mano de Woody Allen, no sin antes comentaros ligeramente mi opinión sobre el film. Es sin duda una comedia entretenida, no es de lo mejor de Allen (sigo sintiendo una especial predilección por "Balas sobre Broadway"), pero está llena de divertidos gags y diálogos ocurrentes y eso ya es de agradecer. Se ha criticado que los personajes son vacíos, caprichosos, pero indudablemente esto ha sido algo consciente y premeditado. Pienso que Allen ha querido reflejar todas las debilidades humanas con este trabajo: dinero, sexo, fama, juventud, éxito... y todas las argucias para conseguirlos por parte de un puñado de personajes de clase alta.
Let's go for a walk without spoilers.
PADDINGTON

Las imágenes tomadas en la calle, donde se desarrollaban muchas de las escenas, eran difíciles de identificar. En ellas aparecían las casas estilo georgiano, blancas y con columnas, que tanto abundan en la ciudad, sobre todo en las zonas con caché. Los personajes entraban y salían, desarrollándose las escenas en varias ocasiones en los soportales de estas típicas residencias.

Gracias a la página de la productora, he podido averiguar que se trata de grabaciones realizadas en su mayoría en la zona de Paddington, distrito de Westminster, concretamente la casa de los protagonistas principales está situada en Cleveland Square (Bayswater). Por cierto, es el único dato de localizaciones que dan los productores en la página web. Es una zona residencial, a mitad de camino entre Marylebone y Notting Hill, efectivamente repleta del estilo de casas mencionado y donde muchas de ellas son hoteles. También muy cercana a Hyde Park y Kensington Gardens, dato importante para los amantes de la naturaleza.

Gracias a la página de la productora, he podido averiguar que se trata de grabaciones realizadas en su mayoría en la zona de Paddington, distrito de Westminster, concretamente la casa de los protagonistas principales está situada en Cleveland Square (Bayswater). Por cierto, es el único dato de localizaciones que dan los productores en la página web. Es una zona residencial, a mitad de camino entre Marylebone y Notting Hill, efectivamente repleta del estilo de casas mencionado y donde muchas de ellas son hoteles. También muy cercana a Hyde Park y Kensington Gardens, dato importante para los amantes de la naturaleza.
Paddington es una de esos barrios del centro de Londres realmente caros para vivir, y por ser más que todo residencial, yo os recomendaría dar un paseo de unos 20 minutos hasta la vecina Marylebone, zona repleta de coquetas tiendas, pastelerías (no perderse la Chocolatería Rococo) y restaurantes. Un apunte para hacer un almuerzo, la quesería-tienda delicatessen "La Fromagerie", y luego tomar el té, puntuales a las cinco de la tarde, acompañado de scones calentitos, servidos con cubertería de plata, crema fresca y mermelada (quién los pillara ahora) en la Wallace Collection. Esta galería posee una pequeña colección pictórica reunida por un excéntrico dandy del XIX, el cuarto marqués de Hertford, apellido de la familia a la que perteneció esta mansión, donde podemos encontrar obras de Rembrandt, Rubens, Tiziano... Si os apetecen zonas verdes tenéis el Regent's Park muy cerca.
Como veis en este primer apunte y en los sucesivos, las zonas que se muestran son puramente británicas y acordes con el alto nivel de vida de los personajes.
LITTLE VENICE
Little Venice (Warwick Crescent)
BURLINGTON ARCADE
Londres es una ciudad de lujos, como casi todas las grandes urbes occidentales, y no faltan en ella calles cuajadas de exclusivos y carísimos establecimientos, inaccesibles para la mayoría de los mortales, donde un par de zapatos hechos a mano con la más fina de las pieles pueden costarte el sueldo de varios meses. Tal es el caso de la céntrica Burlington Arcade, una galería cubierta abierta desde inicios del siglo XIX en Mayfair, donde se encuentran un buen puñado de las tiendas que suministran directamente a su graciosa majestad y familia, de hecho, si así ocurre, muestran el escudo de la realeza en toda su exclusiva publicidad. A Burlington Arcade se puede entrar tanto desde Picadilly como desde Burlington Gardens, ya que la galería atraviesa toda la manzana. Lo que más abunda en ella sin lugar a dudas son las joyerías, los más afamados joyeros tienen aquí su "chiringuito". Si ver tiendas, por muy exclusivas que sean, os horroriza, muy cerca de allí está la Royal Academy of Arts, hace años pude ver aquí una increíble retrospectiva de Kandinsky.
Volviendo a las joyerías, me preguntaba yo insistentemente, cuál de ellas habría abierto sus puertas al equipo de rodaje de Allen, para que Naomi Watts (ella genial en su papel, como siempre) y Antonio Banderas (él...soso con ganas), representaran la típica escena de "hombre quiere regalar diamantes a una mujer y requiere el consejo de su secretaria/ayudante". Pues bien, me puse a investigar en la red e increíblemente di con un artículo, donde no aparecía por ningún lado el nombre de la película, pero sí describía que se grabó una escena de una película de Allen en la joyería Bentley & Skinner, una de las míticas de la ciudad, experta en el diseño de joyas antiguas y que antes se encontraba en New Bond Street. Por supuesto, tiene entre sus clientes a la realeza británica desde tiempos de la reina Victoria.
Joyería Bentley & Skinner situada dentro de Burlington Arcade
BATTERSEA
Battersea es una zona al sur de Londres, en otro tiempo zona industrial de la ciudad, y que ahora, sobre todo en la parte que tiene como frontera norte al Támesis, se ha transformado por completo y poblado de edificios de apartamentos modernos y vanguardistas. Vivir aquí, hoy por hoy, cuesta un riñón. Estaba casi segura, por la panorámica que muestra el fotograma donde aparece Hopkins, que la imagen estaba captada desde el Albion Riverside Building (muy cerca está el estudio de Foster & Partners) y mi hermano que pasa a menudo por aquí, me lo ha corroborado. Al fondo, se ve el victoriano y precioso puente Albert Brigde, que lleva directamente a Chelsea y su famosa calle comercial King's Road en la otra orilla (este paseo andando es muy recomendable).
No quiero aburriros más, pues el post se está haciendo muy largo, Londres es así de intensa, pero a lo largo del largometraje, un buen puñado de esquinas, si bien no las identificaba exactamente con su nombre y apellidos, me devolvían la imagen de la ciudad que tanto me gusta, como esas pequeñas librerías de viejo que aparecen por cualquier pequeña calle y que tienen a su lado un pub o cafetería con mesas de madera fuera, donde sentarte a leer tranquilamente los días soleados (que no creáis que no existen, hablo de los sunny days).
O esos restaurantes/cafés tan originales, surgidos de imprevisto. Vas a una tienda de teteras, libros, ropa o de lo que sea, y casi siempre encuentras al fondo una coffee shop coquetona, para tomarte un té calentito. Pero no vivo en mi, desde que mis ojos presenciaron la escena de Anthony Hopkins y Gemma Jones en lo que parece una especie de invernadero-restaurante, donde me imagino se podría comprar plantas y, por supuesto, degustar exquisitos menús. Lástima que la fuerza mayor me impidió quedarme a ver todos los títulos de crédito completos, que puede que aparezca una mención, pero ya tengo a mis adorables contactos londinenses en alerta para encontrar el sitio e ir en próxima visita si realmente merece la pena.
Edito para decir que encontré este precioso lugar, se llama Pertesham Nurseries, aquí podéis ver su Web. Se trata de una floristería, tienda de muebles y decoración en general, cafetería y restaurante... Un lugar sin duda muy británico, con elevados precios, no olvidemos que estamos en Londres :-), situado en el barrio de Richmond, al suroeste de la ciudad.
¿Dónde estará este lovely restaurante en lo que parece un invernadero? Lo encontré!
Tengo que confesar que me lo he pasado pipa escribiendo este post, oteando fotogramas de la película y tratando de identificar los lugares que mostraban según lo que recordaba al verla. Londres es una ciudad que realmente me fascina y a la que no me cansaré de volver una y otra vez. He perdido la cuenta de las veces que la he visitado y disfrutado, pero para qué contarlas, si cada una de ellas es única e irrepetible, como muchas de las películas de Woody Allen.
Hasta la próxima.
Hasta la próxima.
The Clash - London Calling
Las películas de W. Allen están plagadas de estupendos arreglos de música jazz y clásica, que dan un ritmo especial a sus comedias. Sin duda son parte importante del guión, pero me voy a salir por la tangente y en mi estilo, he elegido a otro"clásico" de la historia de la música británica, tanto el grupo como la canción. The Clash no necesitan presentaciones, solo decir que con esta canción y el álbum del mismo nombre al que pertenecía, rompieron todos los moldes en los recién estrenados años 80. Es considerado uno de los mejores trabajos de la historia de la música.